Un poco de nada

He querido dejar de lado lo personal, pero no puedo. Todos los días al dormir sé que mañana será un nuevo día y será una nueva historia.

Hoy, 21 de Setiembre es cumpleaños de un amigo de toda la vida con el que estudié el colegio, Gerardo, lo he llamado y me he enterado que está viviendo en provincia, casado y con una hija. Me alegra sentirlo estable, tranquilo y animado, un poco cansado, pero debe ser porque es un chambeador.

Cómo cambia todo en la vida, un día estás acá y otro no, ¿suena a cliché de velorio no? Pero el único lugar en el que no quepe esta frase es precisamente en los velorios, me parece redundante. ¿Estoy hablando de velorios? Así como se cambia de tema y uno se empieza a ir por las ramas sin querer, cambia todo. La vida es toda una historia, cada una distinta que otra, para algunos es un sueño, otros se la toman demasiado en serio y hay quienes viven planeando el futuro hasta el último de sus días. Hacer un equilibrio entre todas creo que no está mal.

¿Tema? No tengo, me provocó escribir, poner sobre la hoja algunas de las ideas que me pasan por la cabeza.

¿Cómo y en qué estaremos en 10 años? Los planes varían, pero dependen de nosotros, hay que hacer lo que diga el corazón, no el cerebro, el cerebro analiza todo, pros y contras, consecuencias, el ¿qué dirán? Eso no sirve, puede hacer que vivamos con un nudo en el estómago haciendo solo lo que la sociedad aprueba y no lo que uno verdaderamente quiere. Eso sí, hay que ser valiente.

Vivan felices y hagan lo que les diga el corazón.